el fósforo consumiéndose
alcanza singularidad,
una gota de fuego esculpe abrazando,
llama a nuestros ojos
la sombra también abraza
el amor es un adicto a la materia
...
-tiene ojos la máscara?
-tiene palabras
...
¿es una palabra de adiós
eso que convulsiona
en el lecho
de este río
de pronto traslúcido?
...
le hago voces a unos dibujos
de tinta lunar
sobre la mesa
involucro las manos en el baile
de la copa y la botella
todas estas cosas somos una sombra
que estira
y trepa la pared
un arácnido elegante,
inconmovible
me pregunto si vamos a escapar
un día de estos
y las piernas
muy finas
no responden
...
entre sábanas heladas
respiro cenizas de tabaco
oigo el tamaño de la noche
mientras canta la copa al estrellarse
la curva de un pasillo
acaba con el cuerpo de una mujer
que observa para siempre
...
el cuerpo ocupa,
sucesivamente,
los espacios
dramaturgia en las mañanas
que no van a llegar
un vino rojo, sumiso,
amoroso con las luces
liquida palabras en la neutralidad
o panza
de la copa
relato de un camino,
demasiado lejos,
para desdecir
...
tres cosas
el sobre que chista
como una serpiente
debajo de la puerta
media tijera hundida
en las profundidades
de una foto
pájaros por toda la casa
o sus sombras
tiradas en el piso
...
hit
hay una sola mancha de humedad
y está en el techo de mi habitación
es la cara de una mujer
que rejuvenece a cada rato
imposible
no soñar con ella
al día siguiente se queda pegada,
se pone de moda
en las regiones de la mente
...
alguien teje
alguien teje en la habitación de al lado,
hay que hacer enorme silencio para saberlo
alguien teje con antigua juventud
en las calles bajo tierra,
en los puente entre el cielo y el paisaje,
en el silencio voraz de los espejo
alguien teje el guión de una vida simultánea
hay que hacer enorme silencio
y bailar con el fantasma
para saberlo
...
los hogares son ocres, son cúbicos,
los vidrios están limpios,
tienen invisible la tristeza
el paisaje se mueve suavemente,
los ojos de los niños podrían arder
la voz pesada de papá
se hace risas contra las paredes
las blancas cortinas de tul
acarician intrusos que no tienen cuerpo
la madre se pregunta si es dolor
aquello que se agita en los sótanos de la piel
la niña, en cambio, no deja de soñar,
incompleto su pájaro la espera
entre árboles de fuego
...
esto no es vida
es solo belleza
vista desde atrás
cuando se escapa
No hay comentarios.:
Publicar un comentario